Los alimentos, como las personas, se adaptan a cada época del año. Ahora que se acerca el invierno, se vuelven realmente apetecibles los platos calientes. Aquí tienes una receta de sopa de trucha que querrás repetir una y otra vez.
Propiedades de la trucha
La trucha es un pescado cardiosaludable y nutritivo. Destaca por su bajo contenido en grasa (3%), aspecto que le convierte en el menos graso de los pescados azules, tal y como afirma la Federación Española de Nutrición (FEN).
La carne de trucha es rica en selenio, fósforo, potasio, magnesio y vitaminas del grupo D y B (B6 Y B12). Por lo que es un alimento muy recomendado para las mujeres embarazadas y las personas diabéticas.
Además, es fuente de proteínas con elevado valor biológico y ácidos grados omega-3, ácidos grasos que se relacionan con la reducción de triglicéridos, colesterol en sangre y la presión arterial.
Ingredientes
Para elaborar una sopa de trucha al estilo de Castilla y León, necesitarás un listado de ingredientes fáciles de conseguir en cualquier mercado:
- 3 truchas.
- 4 dientes de ajo.
- Perejil.
- 1 cebolleta.
- 1 pimiento verde.
- 200 gramos de pan de hogaza.
- 1 litro de agua o caldo de verduras.
- 1 hoja de laurel.
- Pimentón (dulce o picante)
- 1 cayena.
- Aceite de oliva virgen extra.
- Sal.
Método de elaboración sopa de trucha
En primer lugar, en un mortero tradicional, preparar un majado con los dientes de ajo, la cayena y las hojas perejil. Cuando esté suficientemente pastoso, incluir una pizca de sal, el aceite y el pimentón. Reservar para más adelante.
Después, cortar la cebolla y el pimiento verde en tacos pequeños para elaborar el sofrito. Rociar aceite en una olla grande e incorporar las verduras hasta que estén pochadas.
Acto seguido, verter el agua o en su defecto, el caldo de verduras, y añadir los lomos de truchas junto con el majado de ajo, cayena y perejil y las hojas de laurel. Poner a cocer durante unos 10 – 15 minutos. Sazonar al gusto.
* Si eres de sabores intensos, es el momento de rectificar de pimentón, ya que le otorgará un color más rojizo e intensificará el sabor de la sopa.
Mientras la mezcla emulsiona y la trucha se cuece, cortar el pan en rebanadas finas. Si quieres seguir la receta estrictamente, deberás usar una hogaza leonesa, si no puedes, cualquier otra puede valer.
Por último, colocar las rebanadas de pan en el caldo y subir la intensidad del fuego hasta que hierva (durante 5 minutos). Transcurrido ese tiempo, dejar reposar otros 5 minutos y servir en una cazuela de barro.
Pescado y vino tinto, rompiendo las reglas del maridaje
Comúnmente, se ha estandarizado que el pescado debe acompañarse con vinos blancos. Si bien, existen algunas excepciones, como es el caso de los pescados con grandes proporciones de grasa.
Los pescados azules, como la trucha, dada su intensidad grasa, casan a la perfección con vinos tintos de tanino suave, para que no enmascaren el sabor del pescado.
Centrándonos en esta receta típica de Castilla y León, de condición especiada y pescado graso, la elección más recomendable es un tinto elaborado con uva de variedad tempranillo y con cierta crianza en barrica.
Nuestra recomendación es Raíz Crianza. Un vino de Denominación de Origen Ribera del Duero, con un tanino fino, amplio y eterno. De gran personalidad, volumen e infinita largura que debes descubrir.