Segovia es una ciudad repleta de historia y arte. Sin embargo, un lugar también se conoce por su oferta gastronómica y en este caso, la ciudad del acueducto tiene mucho que ofrecernos. Te explicamos paso a paso cómo puedes preparar en casa un delicioso ponche segoviano. ¡Aquí tienes la receta a fuego lento!
¿Cuándo surgió el ponche segoviano?
La receta del ponche segoviano ha pasado de generación en generación desde que el confitero Frutos García Martín desarrolló la fórmula para elaborar uno de los postres más característicos de la provincia de Segovia.
La idea surgió en una pequeña confitería de la capital segoviana, El Alcazar, fundada en el año 1926. El propósito de García Martín, dueño del negocio, era dejar huella en la historia y proporcionar a la ciudad un postre que identificase a los aldeanos.
Algunos teóricos creen que fue el rey Alfonso XIII, muy asiduo a visitar La Granja de San Ildefonso, uno de los primeros en probar y enamorarse del ponche. No obstante, la fama se le otorgó tras ganar la Ex Universal de Barcelona en el año 1929.
Ingredientes
La elaboración de este inconfundible postre de la gastronomía segoviana requiere de un listado de ingredientes sencillos. Esto es lo que necesitarás para elaborar tu propio ponche:
Para el bizcocho:
- 6 yemas.
- 3 claras.
- Maicena (3 cucharadas).
Para el almíbar:
- Azúcar (2 tazas).
- Agua (2 vasos).
- Cáscara de limón.
Para la crema:
- 1/2 litro de leche
- 3 yemas.
- 75 gramos de harina.
- 125 gramos de azúcar.
- Vainilla.
- Piel de limón.
Para el mazapán:
- Almendras molidas.
- Azúcar glas.
- 1 clara.
El ponche segoviano paso a paso
Primer paso. El bizcocho
Existen múltiples formas de preparar un bizcocho. Nosotros optamos por la opción al baño María. Un método rápido e higiénico con el que conseguirás un bizcocho de lo más esponjoso.
En primer lugar, hay que precalentar el horno a 180ºC. Acto seguido, en un bol batir las yemas, añadir la maicena y mezclar todo con una varilla mediante movimientos envolventes.
Por otro lado, hay que llevar las claras a punto de nieve. Cuando estén listas, se añaden a la mezcla resultante de las yemas y la maicena. Después, verter el resultado en un molde rectangular.
En siguiente instancia, servir agua en la bandeja el horno y colocar el recipiente encima. Hornear durante 15 – 20 minutos aproximadamente y después, una vez se haya enfriado, cortarlo en dos capas.
Segundo paso. El almíbar
El almíbar es el jugo que bañará todo el bizcocho. Para elaborarlo, debes poner a calentar en una olla el agua, el azúcar y la cáscara de limón. Cuando hierva, dejar reposar durante 10 minutos. Una vez listo, con la ayuda de una brocha embadurnar todo el bizcocho.
Tercer paso. La crema
La crema pastelera es una de las claves de este postre. Para cocinarla, lo primero que tenemos que hacer es infusionar 150 mililitros de leche junto con un palo de vainilla y piel de limón.
Por otro lado, en una olla añadir las yemas de huevo junto con el azúcar y remover bien con una varilla para que no se pegue. A continuación, verter la leche y la harina en la olla y mezclar bien para que no queden grumos.
En siguiente lugar, añadir la leche infusionada (previamente colada) y remover constantemente. El fuego debe de estar en un nivel medio para que se vaya cocinando lentamente.
Poco a poco se irá generando una masa homogénea. Sabrás cuando está lista en el momento que espese y adquiera la textura suave que caracteriza a la crema pastelera.
Finalizada, hay que dejarla atemperar y después rellenar el bizcocho. Recuerda cubrir también con una fina capa la parte superior. De esta forma quedará mucho más jugoso.
Cuarto paso. El mazapán
Llegamos a la fase final, el mazapán. Para elaborarlo hay que mezclar en un bol una pizca de azúcar glas, la clara del huevo y las almendras molidas. En caso de que la mezcla quedé rígida, puedes añadir unas gotas de agua para suavizar.
Una vez hayas obtenido la mezcla, lo siguiente es amasar con la ayuda de un rodillo. Recuerda poner un poco de azúcar glas sobre la superficie para que no se pegue.
Cuando tengas una lámina fina, es el momento de cubrir el bizcocho con ella. Una vez superpuesto, dobla las esquinas y con la ayuda de un cuchillo elimina los restos.
Para decorarlo a la vieja usanza, utiliza una plantilla en forma de rombos y espolvorea azúcar glas por encima del mazapán. Después, deja enfriar y cuando se atempere… ¡a disfrutar!
Ponche segoviano y vino Ribera
En Bodegas Raíz de Guzmán rompemos las reglas y te proponemos un acompañante que cambiará la forma en que percibes el sabor y la textura del ponche segoviano.
Nos referimos a Raíz Rosado, el vino más fresco y afrutado de la casa. La elección idónea para acompañar repostería. El porqué es muy sencillo. Su delicada acidez y sabor a frutos rojos crean una perfecta combinación con el dulzor de la crema pastelera y el mazapán.