Llegar a convertirse en un sumiller de prestigio no es una tarea fácil, se necesitan una serie de conocimientos técnicos, experiencia en el sector y años de duro trabajo en el mundo de la enología. Además, es una figura que debe estar en constante formación.
Ya vimos en anteriores post que una de las funciones más importantes para un sumiller es aconsejar a los clientes de forma objetiva atendiendo a una serie de criterios, por ejemplo, el maridaje. No obstante, las labores de un sumiller son más amplias y van más allá de lo que ven los clientes, desde la elaboración de la carta de vinos hasta el mantenimiento y gestión de la bodega.
Jon Andoni Rementeria
Jon Andoni Rementeria tiene 49 años y , aunque estudió ingeniería, su amor por los vinos le condujo por un camino totalmente distinto. Actualmente ejerce de sumiller en el restaurante Remenetxe de Muxica (Vizcaya).
El sumiller consiguió alzarse con la victoria en el Campeonato de España de Sumilleres 2018, aunque no es el único título que carga a sus espaldas. Ha ganado otros campeonatos propios del País Vasco en tres ocasiones (2015, 2017 y 2018) y consiguió el trofeo Custodio López Zamarra 2009. También fue finalista Nariz de Oro en 2011 y dos veces finalista en el concurso nacional de vinos Premio Sumiller Rioja en el año 2007 y 2008, entre otros muchos reconocimientos.

Fotografía de Juan Lazkano
Manuel Jiménez Vidal
Manuel Jiménez Vidal nació en 1985 y a sus 34 años ya cuenta con el título de Mejor Sumiller de España 2017.
El zaragozano comenzó a trabajar en restauración para conseguir algo de dinero mientras estudiaba la carrera de Terapia Ocupacional. Atraído por el mundo vitivinícola, comenzó a formarse con la Asociación de Sumilleres de Aragón, momento en el que se enamoró de esta profesión.

Manuel Jiménez Vidal (izquierda) en el Salón Gourmets
Custodio Zamarra
Custodio Zamarra, uno de los mejores sumilleres de España, nació en el año 1949 en Villatobas (Toledo) y desde niño se ha dedicado al mundo de la restauración. Sus primeros vestigios de sumillería empezaron en la taberna de sus abuelos Casa Zamarra.
Proveniente de una familia humilde, no pudo desarrollar su talento como estudiante debido a la escasez de recursos económicos. Por este motivo, cuando acabó los estudios primarios obligatorios, decidió mudarse a Aranjuez a trabajar en el Bar Regio, propiedad de unos familiares cercanos y en el que comenzó a adquirir conocimientos técnicos.
Finalizada su etapa en Aranjuez, se traslada a Madrid, donde empieza a trabajar de camarero en varios establecimientos. Pese a ello, el momento clave en la vida de Custodio fue cuando en 1973 Jesús María Oyarbide le invitó a formar parte de su nuevo equipo en el Restaurante Zalacaín, primer tres estrellas de España y local al que ha dedicado más de 40 años de su vida.
A pesar de que ya ha colgado su delantal de sumiller profesional, sigue compartiendo sus conocimientos y experiencia en el mundo del vino con las futuras generaciones de sumilleres en diversos eventos, dando conferencias e impartiendo clases.

Custodio Zamarra con Ignacio Figueroa, enólogo de Raíz de Guzmán
Gemma Vela Humanes
Gemma Vela Humanes es una profesional de los pies a la cabeza. Tras estudiar enología, decidió dedicarse a la sumillería porque consideraba que hacían falta mujeres a la cabeza de esta rama profesional. Empezó a formarse en el restaurante El Amparo de Madrid y Martín Berasagueti en Lasarte (San Sebastián). Desde el año 1995, a sus 23 años de edad, comenzó a trabajar en el Hotel Ritz como sumiller profesional.
Gemma es toda una amante de la uva tempranillo, considera que es la variedad más tradicional y que representa mucho a España. “En Raíz no hay altibajos, mantiene su línea de calidad. Sus vinos no defraudan. Por eso es una marca con clientes muy fieles” afirmó la sumiller en la presentación de Voy Olé en Madrid.
Cuenta con un currículum intachable en el que destacan numerosos premios: Mejor Sumiller 2011 (Revista Metrópoli), Mejor Sumiller 2010 (Guía Gourmetour), Joven Promesa en el Mundo del Vino (Revista la Cazuela), entre otros. Además, colabora en la edición de la Guía Gourmets.

Gemma Vela (centro) en la presentación de Voy Olé
Josep Roca i Fontané
Josep Roca (Girona, 1966) es el mediano de tres hermanos (Joan y Jordi Roca) con los que comparte la gestión de El Celler de Can Roca, tres estrellas Michelín. También es copropietario del salón de Banquets Mas Marroch en Vilablareix (Girona) y asesor del restaurante Moo en el Hotel Omm (Barcelona)
Roca ganó el Premio Nacional de Gastronomía al Mejor Maître de Sala en 2004, Premio al Mejor Sumiller en 2010, Premio de la Academia Internacional de Gastronomía al Mejor Sumiller en dos ocasiones (2005 y 2011).
Además, ha escrito un libro (Tras las Viñas) con la ayuda de la psicóloga Inma Puig, en el que narra la historia de 12 bodegueros y su estrecha relación con los vinos.

Josep Roca (derecha) con sus hermanos
Cristina Alcalá
Cristina Alcalá lleva vinculada al mundo del vino gran parte de su vida. Su formación y trayectoria profesional son impecables. Es licenciada en Sociología por la Universidad Complutense de Madrid y postgraduada en Investigación de Mercados. También tiene un Máster en Enología y Viticultura por la ETSI Agrónomos de Madrid y es diplomada como sumiller profesional por la Cámara de Comercio de Madrid.
Ha trabajado como consultora de marketing y estrategias de comunicación/posicionamiento de marca tanto para instituciones públicas como empresas privadas. También ha colaborado en diversos medios de comunicación como en Radio Nacional Española (“Esto me suena”) o El País, además de en algunas revistas especializadas (Vinum-MiVino y 5 Senses Wine).
Ha participado como jurado de cata profesional a nivel nacional e internacional y también ha recibido reconocimientos, entre sus premios destacan: Mirador del Vino 2015 y el Premio a la Mejor Tarea de Comunicación 2013 por la D.O Ribeiro.

Imagen Cristinaalcalá.com
Artículos relacionados:
Custodio Zamarra nos visita en el Salón Gourmets 2019.
El sumiller: origen, historia y funciones.
Gemma Vela sobre Voy olé: «Es equilibrado, redondo y muy bien elaborado».