Aunque la vendimia es el momento más vistoso, para conseguir unos vinos de la calidad de Raíz hay que cuidar cada detalle en el viñedo, la poda es uno de lo más importantes. Hoy hablamos con Ignacio Figueroa, enólogo de Bodegas Raíz de Guzmán para que nos explique cómo se poda un viñedo.
Qué es la poda del viñedo
En palabras de Ignacio Figueroa, «la poda es la renovación y la regeneración de la madera». El objetivo más importante de la poda es cortar las ramificaciones de la cepa para que no crezca de forma descontrolada. Así, al limitar los pulgares , se consigue que no entorpezcan los trabajos de labranza o de cuidado del viñedo.
Puede parecer sencillo, pero la calidad de la uva, y por tanto la calidad del vino, dependerá en gran medida de una buena poda. Con la poda, el viticultor le dice a la planta cuál es la mejor zona para centrar sus esfuerzos y así aprovechar mejor los nutrientes
Hay principalmente dos razones importantes para podar el viñedo: limitar la producción de la uva para asegurar la máxima calidad y controlar el crecimiento de la viña para que dure más tiempo.
¿Cuál es el mejor momento para la poda?
En líneas generales, el mejor momento para empezar con la poda es cuando la planta está en reposo, durante el periodo de latencia. desde que cae la hoja, normalmente desde noviembre, hasta el inicio de la brotación con el comienzo de la primavera en marzo. «Dentro de ese periodo es importante evitar los días de hielo, pues que puede resquebrajar el pulgar», apunta el enólogo.
Obviamente, la última palabra la tienen el responsable de campo de la bodega, que es la persona que mejor conoce el viñedo. En el caso de Bodegas Raíz de Guzmán, la primera poda suele hacerse entre enero y febrero, mientras que la segunda, la poda en verde, se hace en los meses de abril y mayo.
La poda en seco
Un factor a tener muy en cuenta para la correcta formación de la planta es el sistema de conducción de la vid. En el caso de los viñedos de Raíz, estructurados en espaldera, se utiliza uno de los más comunes: un sistema de poda corta sobre doble cordón Royat.
El doble cordón Royat es un sistema sencillo, en el que basta con renovar cada uno de los pulgares en la misma posición empleando el sarmiento de brotación mejor situado, normalmente el más bajo.
«En cada cordón o brazo hay 3 pulgares, de los que salen las yemas que más tarde darán origen a los pámpanos. Con la poda debemos conseguir que cada año salga lo mismo que el anterior y renovar lo que tenemos», explica Ignacio. «Para conseguirlo, siempre dejaremos un puesto o pulgar, con dos yemas, cortamos el mejor situado a la altura de la tercera yema y eliminamos el resto».
La poda en verde
Meses después de la primera poda o la poda en seco, dará comienzo la poda en verde. Carlos Santos, responsable de campo de de Bodegas Raíz de Guzmán, lo explica: «“Cuando la planta alcanza una altura de unos ocho dedos, dejamos solo dos ramos por cada pulgar de los que habíamos dejado en la poda en seco”.