Ahora que llega el calor, los postres fríos vuelven muy apetecibles. Si buscas algo con lo que sorprender a tus comensales, tenemos el oro de los dulces. Así puedes preparar un delicioso tiramisú al más puro estilo italiano.
Cómo surgió el tiramisú
El tiramisú es el postre italiano de mayor prestigio a nivel nacional e internacional. De hecho, se considera la quinta palabra más conocida por los extranjeros y está presente en más de 20 diccionarios.
Tal es su fama, que trae consigo múltiples historias y orígenes dispares. A lo largo de los años, son muchos los cocineros que han tratado de apropiarse la receta.
Una de las leyendas más extendidas es que el tiramisú fue creado en la década de los 50 en los burdeles de la zona del Véneto. Así lo afirma Arturo Filippini, responsable de la cadena de restaurantes Toulá,
El postre era ofrecido a los clientes como un método afrodisíaco y reconstituyente utilizando la siguiente expresión “te tira su”, lo que en dialecto del véneto significa “llévame arriba”.
Un juego de palabras que con el tiempo sufriría diversas variaciones etimológicas. Aspecto por el cual, acabaría derivando en el nombre que conocemos hoy día: tiramisú.
Ingredientes del tiramisú

Resulta difícil resistirse a un postre de tal magnitud. Además, es un plato sencillo, con ingredientes económicos y fáciles de conseguir. ¿Se te antoja? Esto es todo lo que vas a necesitar:
- 200 mililitros de café.
- 500 gramos de queso mascarpone.
- 1 paquete de bizcochos de soletilla.
- 1 vaso de licor Amaretto.
- 4 huevos.
- 50 gramos de azúcar blanco.
- Cacao amargo.
Elaboración del tiramisú
Para preparar la crema, el primer paso es batir los huevos junto con el azúcar durante aproximadamente unos 15 – 20 minutos. Después, bajar la velocidad de la batidora al mínimo y añadir el queso mascarpone lentamente hasta conseguir la textura deseada.
En siguiente instancia, se debe mezclar el café con el licor Amaretto. Es importante que el café sea de máquina y de carácter intenso.
Acto seguido, hay que montar la estructura. Para ello, mojar uno a uno los bizcochos creando una base. Una vez lista, extender la crema por encima. Así hasta completar todas las capas (normalmente tres o cuatro, dependiendo del grosor del bizcocho).
Para finalizar, rallar una tableta de chocolate negro por encima (aunque también se puede espolvorear cacao en polvo) y dejar enfriar en la nevera durante 3 horas como mínimo.
A la hora de servir, es importante desmoldarlo con cuidado. Para decorar, puedes coronar la superficie con unas hojas de menta. ¡Te encantará!
Notas: Si se te hace complicado encontrar el licor Amaretto, puede sustituirse por brandy. Por otro lado, el queso mascarpone puede cambiarse por una mezcla de queso cremoso, nata, agua y azúcar.
Raíz Rosado y tiramisú, la combinación idónea
Las reglas están para romperlas y por ello, creemos firmemente que acompañar un postre ya no es exclusivo del café. Licores, champán y vino son los acompañantes perfectos para ciertos postres.
En esta ocasión, elegimos Raíz Rosado. Un vino fresco, denso y graso que envuelve todo el paladar sin dejar opción al desequilibrio. Además, destaca por su deliciosa acidez que refresca las papilas gustativas.
Alternar una cucharada de tiramisú junto con un sorbo de nuestro vino más fresco es toda una experiencia. La textura y dulzor del postre actúan en armonía con el ligero tono ácido de nuestro rosado. ¡Disfrutarás por dos!